Con la fachada y el rótulo original intactos, este es uno de esos comercios que debería servir de modelo de cómo tendrían que funcionar los establecimientos tradicionales. Adaptarse a los tiempos no significa borrar las huellas del pasado, ya que conservar los signos de identidad añade valor y prestigio a tu negocio.
Fundada en 1950 El Zapato de Oro apenas ha cambiado en todo este tiempo. Situada en lo que fue el epicentro del barrio en tiempos antiguos, junto a las antiguas Escuelas Pías y la Corrala, sigue funcionando gracias a la fidelidad de sus clientes, en la tercera generación de la misma familia detrás del mostrador, mientras el barrio de Lavapiés sigue cambiando a su alrededor.
Hace poco uno de los más ilustres vecinos del barrio, el escritor e hispanista Ian Gibson, eligió la fachada del Zapato de Oro para posar para un reportaje fotográfico, probablemente porque este es uno de los sitios más castizos de Lavapiés.
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Fotografía propia, de 2017, para Comercios Históricos de Madrid
©2022 Luis Pita Moreno